6.23.2017


8.30.2016

SE LO ASEGURO, OIGA.
Tragicomedia
Sinopsis: Un vendedor de seguros apoteosis propone una póliza de único uso. Una póliza de suicidio. El perplejo cliente la trata de rehusar. Pero, ¿acaso puede?


Me llama mucho la atención la peculiaridad con la que algunas se denominan... Entre la ironía y la corrosión,  “Seguros Apoteosis” era el nombre de mi compañía de seguros. No crean que la elegí sólo por ello, soy menos idiota que eso,  me hizo decidirme también algo de mucho más calado. Elevado sobre un escudo de figuras rampantes aparecían, a modo de consigna, estas palabras: "los utilizará una sola vez". Yo sólo hubiera usado esa frase  para anunciar unos condones o, a lo sumo, unos pañuelos de papel. No entiendo muy bien para qué sirven estas chorraditas del marketing.  Sus productos, ya se los pueden imaginar: jubilación, accidentes y ¡cómo no, decesos! ¡Yo los tengo todos! ¿?
El agente y cobrador del seguro me visitaba todos los meses (a mí me gustaba que viniera el cobrador a casa, nada de eufemismos bancarios.  El cobrador le hace a uno más. . . consciente). Esa tarde quería ofrecerme una novedad, siempre en su línea de seguros que yo había dado en llamar desechables, esto es, de un sólo uso. Me gustó la fracesita. El hombrecillo de la muy aparente cartera   marrón con cierre cremallera cobró primeramente el recibo del mes y ,con una precisión de carterista del bus urbano, depositó el importe en el lado derecho de lo que parecía ser la misma cartera que, diez años atrás, usara el fenecido y olvidado  cobrador que le precedió. Debía ser un regalo de empresa con su logotipo y todo, algo de lo que, al parecer, costaba desprenderse. Parecía de piel, pero, al abrirla seguía oliendo como el primer día que la vi, o sea, a PVC.
- Vengo a ofrecerle un nuevo producto, - se explicaba -  que por ser usted beneficiario de nuestra póliza de decesos le supondrá un coste mínimo. Yo también soy un romántico… Ya no se atienden ese tipo de seguros o se pagan por el banco. Los decesos han perdido su esencia. Donde esté un sepelio con su féretro, su córpore insepulto y su oficio; que se quiten cenizas, responsos laicos y romances.
- Como le dije, - continuó -  vengo a ofrecerle nuestro último lanzamiento. Lo hemos introducido en el mercado, pensando en el futuro y anticipándonos, como siempre, a sus necesidades. Una póliza innovadora, sin precedentes y además complementaria a la de decesos; de la cual usted ya es titular. El… ¡Seguro de suicidio!– exclamó, esperando el desconcierto que no pude evitar  en mi rostro.
-¡Y yo para qué quiero un seguro de suicidio!  Yo estoy encantado con la vida - le dije en tono intimidatorio, como para tirar por tierra semejante majadería-, no tengo ninguna intención de acabar con ella. Antes al contrario, mis intenciones son de continuar aquí,  por lo menos hasta que me llegue la hora, y por lo más también.
- No… si  ya me temía… - dijo él con un tono inequívoco de decepción, como si esperara una respuesta más elaborada por mi parte-. Pero, continuó, mira  que sólo unos pocos desean morirse y, sin embargo, la mayoría de la gente paga religiosamente las cuotas mensuales de nuestro seguro de vida o decesos. Usted mismo sin ir más lejos.  Además, me ha parecido que hablaba de intenciones. ¿Quizá usted conoce cuáles son sus verdaderas intenciones? Será que tiene pocas –Ironizó subiendo de tono-.
Como ve, su argumento es pueril además de prosaico; no le da al asunto la... "altura" que requiere. Déjeme hablar Sr. Recuenco, imagine, que dentro de tres o cuatro años, tras una grave crisis existencial (que aunque suene algo trasnochado, haberlas… hay las) usted decide de forma voluntaria y sin ningún tipo de coacción acabar con su vida. ¿Por qué?, a nosotros eso no nos interesa. Pero,  no sé, digamos que le da por ahí. ¿Qué haría? ¿Saltar, dejarse caer desde el más alto de los puentes de la ciudad?
-Me pone en un dilema, pero quizá sí -, respondí sin mirarlo siquiera, intentando desalentarlo. Con escaso resultado, como verán.
-¡Eso es! - me largó él -, ¡Así, a lo loco!, sin tener en cuenta las consecuencias, que  serían tan impactantes para usted  como lo serían para su familia, en quienes al parecer no ha pensado. Es cierto que no puede estar uno en todo. Imagine a su hijo o a su esposa, o mejor a ambos que es peor, en el depósito de cadáveres e intentando reconocerle entre el amasijo de vísceras, cachos de carne y trozos de escombro incrustados a sus restos mortales. Ese ser que tanto amaron  les abandona de esta forma tan inesperada y tan “precipitada”. Luego, los amigos  insistiendo en ver  su escoria, y usted… Bueno, es un ejemplo, no quiero yo tampoco entrar en detalles morbosos que no aportarían nada. Pero, bueno, y usted, repito, hecho trozos y con el rostro desfigurado. ¿Lo ve?, sin una buena planificación, las cosas no pueden salir bien. Ahí es cuando aparecemos nosotros, que para eso estamos los profesionales. Nosotros, desde la frialdad de la distancia, planificaríamos cada paso necesario para poder realizar un suicido en condiciones  letales, pero al mismo tiempo manteniendo las formas y la parsimonia necesarias. Con un protocolo de actuación que, ¡ríase usted de Arturo & Enderson!, nos proporcionó la certificación de calidad “ISO 9000”, garantizando la seguridad irrevocable y redundante de nuestros servicios en un bucle que siempre pasa por un cliente satisfecho. Un equipo multidisciplinar estudiaría su caso para recomendarle, de nuestro catálogo, aquel suicidio que más le conviniese y le entrenaría en la consecución del  mismo con total garantía. Si no queda contento…y con esto va a quedarse muerto, con perdón, ¡le devolvemos el dinero!  Contamos con una extensa carta: precipitación, ingestas, mutilaciones, autolesiones letales y, cómo no, un extenso apartado de suicidios y gestos suicidas de lo más literario. Usted en la bañera, con un brazo colgando fuera de la misma, en cuya mano aún sostiene una nota explicativa.  Estética, conjugar la estética con el método. Ese es nuestro secreto. Pues, nuestros fundamentos descansan sobre sólidas bases filosóficas. Y eso, créame Sr Recuenco, da una tranquilidad… Nada de locuras a lo Bovary, ¡arsénico; una barbaridad! Horas y horas de estertores agónicos con insoportables dolores… No, no, nada de eso. Usted no padecería esos suplicios, porque nuestro equipo le aconsejaría de un modo aséptico y amoral, el tipo de sustancia a utilizar para no sufrir dolor alguno. ¿Qué es usted, una persona de altos vuelos, un lanzado?, pues le impartimos unas clases de salto, en las que un acróbata especializado le enseñará los secretos para precipitarse con, digamos, la calma  necesaria. Su interior quedará destrozado, pero su inmaculado aspecto externo le permitirá salvar el lance del tanatorio con la dignidad que usted, nuestro cliente, se merece. Guardando las apariencias (porque aparente es como quedará. Eso sí, sólo aparente) y evitando las habladurías morbosas  a las cuales el personal es tan aficionado. Ahí, el impacto será para los asistentes al velatorio. Usted ahí, sin vida. Pero, muy aparente; se le rifarán las plañideras; de las otras salas desfilarán en procesión para ver su cuerpo inerte, paradigma del tan oído “¡Míralo, parece que vaya a echar a andar!”, la envidia del tanatorio. Claro, que ellos no saben la labor callada y metódica que hay detrás: dirección, attrezzo, ensayos, maquillaje…
- ¡Yo no quiero suicidarme!- pude meter entre frase y frase de semejante verborrea.
- ¡Déjeme terminar, no sea maleducado! - me largó, para seguir con su discurso. Lo sabía, no tardaba en "ganármela", pensé -. Y todo, le decía, Sr. Recuenco. Atiendame, que no me atiende. Y todo, contando con la inestimable compañía de uno de nuestros agentes, que le ayudará ante cualquier duda instrumental o contratiempo (nada de ñoñerías ni arrepentimientos de última hora, ¡eh! Con el gasto ya hecho). Al tiempo se levantará acta y juntos darán fe de la correcta aplicación del protocolo. No sabe usted lo importante, lo trascendente en este caso que puede llegar a ser un protocolo.
 ¿Qué desea,  sólo un gesto suicida?, esto es, no quiere matarse pero, para manipular a determinada persona desea montar una escena trágica. Aquí es donde nuestra portentosa imaginación alcanza las cotas más elevadas de realismo,  fundiéndose en una nueva esencia. La realidad imitando al arte.
Por otra parte, tenemos una modalidad realmente innovadora, el suicidio por poderes. Le explico. Pongamos lo siguiente, usted desearía suicidarse pero, por motivos en los que nosotros no entraremos, no quiere quitarse la vida. ¿Le  parece absurdo? Bien, pero nosotros no somos quiénes para cuestionar sus decisiones. En ese caso seleccionamos a una persona (normalmente será un pobre) que tras recibir poderes notariales firmados por usted, procedería a realizar el suicidio como si del Sr. Recuenco se tratara. Podría usted viajar, digamos, a las Bahamas; mientras un indigente se estaría suicidando por usted en Barcelona. Así, suicidado a efectos legales, su familia cobraría la correspondiente reparación económica.
- ¡Pero… eso me parece indigno… Indigno e inmoral! - repliqué yo saliendo, como pude, del estado hipnótico en el que me había sumido el torrente discursivo.
- ¿Inmoral? Sr. Recuenco, nosotros somos una empresa. No entramos en disquisiciones  morales. Resolvemos problemas, ofrecemos soluciones, somos esclavos de los deseos de nuestros clientes, mártires de nuestras pólizas, náufragos en sus fracasos. ¿Le gustaría a usted que, llegado el momento, nos pusiéramos exquisitos y sembráramos la duda sobre la costosa, firme y ecuánime decisión de abandonar este mundo, por la cual usted puede haber optado tras una dolorosa discusión consigo mismo? ¡A qué no! Pues eso, ese es nuestro lema. No vamos nosotros a enmendarle la plana y querer saber mejor que usted, nuestro cliente, lo que quiere hacer con su vida o… sin ella. Libre albedrío amigo Recuenco, libre albedrío. No me diga usted, que el tema del libre albedrío no viene aquí “pintiparado”. Si usted quiere mantener en jaque a su familia y amigos ante la posibilidad de quitarse la vida, nuestro equipo multidisciplinar le proporciona gestos tan seguros para su integridad como creíbles de cara a la galería; de esta forma, ni el más lanudo de los psiquiatras podrá descubrir, ni siquiera atisbar, sus verdaderas intenciones. Con respecto al indigente, ¿qué quiere que le diga?, el darwinismo social… es lo que tiene.
-¡Pero si yo… yo soy feliz!- le indiqué, no ya sin cierta… sí, sí, cierta. Cierta… inseguridad.
- ¡Feliz… feliz!, la felicidad está sobrevalorada. La felicidad es inestable: hoy está y mañana no. ¿Recuerda el caso de Juan Lucena?, hace un mes se quitó la vida precipitándose desde un  ático en Benidorm (no es por echarnos flores, con perdón, pero fue una auténtica obra de arte, cuyos detalles  sería ocioso traer aquí a colación). Bien, pues cuando contrató nuestra póliza, dos meses antes, decía disfrutar de la vida como un enano. A nosotros nos hizo la puñeta, porque sólo había pagado dos mensualidades, con lo costoso que es un suicidio por precipitación, ¡y desde esa altura! Pero, a lo que íbamos; como ve, la felicidad es efímera y veleidosa, diría yo. No puede uno andar por ahí fiándose de semejante concepto, tan voluble, tan… caprichoso. Esto es un valor seguro, nuestro gabinete jurídico está gestionando con la agencia tributaria su inclusión entre las desgravaciones fiscales en la declaración de la renta. Además, a quien consiga no suicidarse (todo un mérito con la que se nos viene encima) le será reintegrada la capitalización a los 70 años, próxima edad de jubilación, en forma de plan de pensiones. Un sobresueldo  que, sumado a su exigua o inexistente paga de jubilación, le permitirá disfrutar de la vejez. Si el destino se lo permite y el sistema de salud pública sobrevive a estos tiempos catastróficos y a otros peores que vendrán y harán de estos buenos.
Por otro lado, si tan satisfecho está de su vida, ¿cómo es que lleva quince minutos escuchándome?.  Atisbo un brillo en su mirada que, en mi opinión, va más allá de un interés por el aspecto meramente teórico de la cuestión. Perdone la interpretación, nada más lejos de mi intención el influir en  una decisión tan personal como ésta. Pero… ¿puedo tutearte?, gracias. Dime Lucas, seamos sinceros ¿quién no ha pensado en alguna ocasión en el suicidio? –Dijo como esperando una confidencia.-
- ¿A dónde quiere ir a parar? - pregunté “algo” escamado.
-¿Tú-tienes-claro-que–esa-afirmación-gratuita-de-tu-satisfacción-vital-no–trata-de-esconder-cierto-instinto-auto-destructivo-que–no--te--atreves-a–encarar-debido-a-un-rígido-superyó-producto-de-una-estricta-educación-judeo-cristiana-que-castiga-cualquier-atentado-contra-la-vida-como-un-atentado-contra-dios-único, verdadero y propietario-de-ese-preciado-don? Y esto es sólo una pregunta, entiéndeme. No quisiera …- Dijo quedándo sin apenas aliento.
- ¿Qué dice de es eso de…de… gratuita? Dije yo balbuceante mientras me agarraba, como si de una barandilla se tratase, a la única palabra que había entendido.
- Sí, gratuita. Yo no te pregunté si eras feliz, sólo te ofrecí mi producto. ¿No será  esa felicidad, proclamada sin que nadie la hubiera mentado, sólo una necesidad, o peor, una pueril esperanza de que todo cambie,  para poder seguir soportando esta vida gris y mediocre a la que te ha tocado resignarte? ¿A quién pretendes engañar? – sentenció con superioridad y, lo que más me jodió, condescendiente.
- ¡Pero usted es, es…! - intenté replicar.
- Usted es, usted es… ¡Diga, diga! Lo entiendo, es mejor echar la culpa a los demás que asumir esa realidad. Nuestra compañía y yo, como su representante, nos hacemos cargo. Somos así de estoicos. Eso lo tenemos, mire usted.
- ¡Lárguese usted de mi casa! - Le empujé bramando como un venado en plena berrea.
- ¿No lo ve?, esto es una muestra más de su insatisfacción. Desplaza sobre mí el odio  que en realidad tiene hacia su propia vida ante su incapacidad para reconocerlo. ¿No quiere firmar? ¡Yo no le veo muy seguro!
- ¡Se largue, coño! – vomité.
- Bueno, si cambia de opinión, ahí le he dejado mi tarjeta. ¡Que luego vienen las madres mías! Y yo no me hago responsable si no ha firmado, ¡que lo sepa! Intento  aclararle las ideas y mira como me trata. – Y se marchó dando un portazo a mi ingratitud.
- Y es que yo, no me pienso suicidar, que no ¡Se lo aseguro, oiga!

10.14.2013

¿PACIENCIA?. LA JUSTA, NI MUCHA NI POCA. ¿VALE?



ATENCIÓN
No intenten hacer lo mismo en sus casas.,.... Pero pueden hacerlo en otros lugares. Tengan en cuenta que esto es una exhibición (de paciencia) realizada por especialistas y en un ambiente controlado. No nos hacemos responsables de lo que pueda suceder si se realiza sin la supervisión necesaria ¿? , con tecnología inadecuada u obsoleta y en ambientes incontrolados
NB: Nos obligan a publicar esta gilipollez ( NO me refiero, en este caso, al vídeo) . Por lo que a nosotros respecta, hagan lo que les venga en gana. Pero, eso sí, no den el coñazo. Vaya a ser que alguien pierda la paciencia.
                                                                   Prófugos desatinados. Producciones intestinas.

6.13.2013

6.02.2013

EL SABER NO OCUPA LUGAR. PERO, LA IGNORANCIA....


  • "El saber no ocupa lugar. Pero, la ignorancia ocupa aún menos."

9.11.2012

EL POEMA DE NONO (La noche de la iguana)

EL POEMA DE NONO
(La noche de la iguana)
Traducción: prófugos desatinados 

Con qué calma  la rama del olivo
observa como  el cielo palidece.
Sin un llanto, sin un rezo,
sin traición ni desespero.

Mientras la luz del árbol obscurece,
el cenit de su vida
para siempre pasará
y desde allí
otra historia ha comenzado.

Una crónica jamás dorada
un pacto entre el musgo y niebla.
Y al final, el vástago roto
desplomado al suelo. Y luego,
un contubernio mal dispuesto
para seres de luz radiante
sobre cuyo verde innato arquea
el obsceno amor que la tierra ha corrompido.

Todavía, la  rama y la fruta grana
observan como el cielo palidece.
Sin un llanto, sin un rezo,
sin traición ni desespero.

¡Por coraje!  también yo pueda
disponer otro nido, otra morada.
No ya en ese árbol dorado.
Mas sí, en este corazón tan asustado.




7.20.2012

Un monólogo escrito por los prófugos desatinados

¿POEMA TERMODINÁMICO EN PROSA?

¿Cómo sacaré todo esto de aquí?. Vacío, helado y cortante vacío quedaría en su lugar. ¿Dónde vuelco esto que ni nombrar puedo?, porque nombrarlo sería sepultarlo bajo un lecho de razón que no le es propio. Sólo el Derviche percibe su naturaleza. La indestructible energía que sus electrones exudan girando en torno al núcleo latiente, despide en su vórtice un calor que lo inflama. Y así, para volver a empezar expandiendo una ternura que no le es correspondida tras romperse el enlace covalente que a su imagen, a su isótopo, lo unía. ¡Níña, tal es su magnitud! Si algo no lo detiene pronto, seguirá creciendo en cada giro que a velocidad lumínica busca el contacto con su imagen isotópica. Si no la encontrara inundaría valles y cumbres, campos y ciudades, personas y animales. Sin que exista solución, arrasaría todo a su paso. Teléfonos, microchips y ordenadores cortocircuitan a su lado; violetas, petunias y magnolias no resisten su vórtico calor. En fin, arrastraría consigo todo el amor. Pues, no la suple. Un vacío de oscuridad abisal ocuparía el planeta. ¡Así de grave se le intuye!
¿Crees que podríamos hacer algo para contenerlo?...
Creo, que con un beso bastaría. Durante un tiempo, al menos.

6.24.2012

NOCHE DE SAN JUAN

En esta inflamada oscuridad
de fantasías desechas,
deseos truncados
e inútiles anhelos.
El fuego anticipa
el aún ardiente rescoldo
que la necesaria y perenne
ilusión sola promete.

6.10.2012

EL PISITO

Alquilar por 550 € el mes y tres meses por adelantado, para ocupar la vivienda, puede parecer un chollo. Pues créanme, lo es. Síganme, si no lo creen, en esta vistita guiada buscando el ideal de vivienda de alquiler. Cualquier cosa que encuentre será mejor que lo que trate de buscar.
Al llegar a la cita con el supuesto propietario, y para empezar, el interfono estaba roto y me toca llamar a un vecino. Mejor así, me dije, que luego viene el cartero, la publicidad o, lo que es peor, aparecen las visitas a molestar a cualquier hora.
¡Vaya, un quinto sin ascensor! esto es protección cardiovascular, que diría mi cardiólogo. Tras un laberinto de escaleras accedo a un angosto y lúgubre pasillo. Con poquita luz, ¡eso es, que luego hay que pagar el recibo! y además así no se ve el polvo de las estanterías – pensaba yo sin comentario alguno -. En el suelo, el terrazo era una adivinanza que ondulaba bajo estratos de incrustada mugre (roña, que dicen en mi pueblo), cuyo análisis daría para una tesis doctoral de geología urbana, uno de mis hobbies. Un tropiezo pone a flote un transistor de los años 60, más allá asoma el dedo momificado y acusador de, en el mejor de los casos, un inquilino que tras sufrir una intoxicación botulínica falleciera hace algo más de una década.
La entrada al aseo provoca en mí una sorpresa aún mayor, ¡un inodoro en negro mate! Que no hombre, que no. Es el lado oscuro que ha invadido el blanco esmaltado del váter. La familia no tenía un dálmata y, por tanto, no podía estar tumbado en la bañera… así, debía de ser la tina, que exhibía una combinación blanco y negro . Esto me gusta. Además, sería emocionante cagar al borde de un agujero negro. Muérete de envidia Stephen Hawkins.
La cocina: “territorio resbaladizo, reino del pringue, imperio del engrasado”. El ecosistema de detrás de los fogones, incluía fauna y flora que haría las delicias de cualquier biólogo. Hongos y musgo proliferaban en ese entorno húmedo privilegiado, también cuna de la entomología, que gozaba de méritos para estar incluido en la guía de humedales de la Península Ibérica. Podría montar una empresa de champiñones, o de caracoles (recordé delicatesen, inevitable) y publicar el manual del urbanita autosuficiente. ¿Un problema? ¡Ya! Una oportunidad.
Las puertas no necesitan picaporte porque ninguna encaja dentro del marco. ¡Joder!, son todo ventajas. Además estaba muy bien ventilado, ya que las ventanas no cerraban. ¡Perfecto, así corre el aire!, que luego se vicia el ambiente y no hay quien esté. La decoración, en cuanto a estilo, diríamos que era ecléctica, "en concreto" un híbrido entre kitsch, art decó y…”Derribart”, que no es el nombre de un filósofo, si no una corriente del llamado  "escoriart”. Y es que, si se sabe elegir, hay que ver lo que da de sí una escombrera.  La instalación eléctrica, al conectarse, parecía la nit de l'albá. Muy ilicitano, eso me ha llegado. Me dije, no sin algo de acojono.
El precio me impedía quedármelo, 550 pavos al mes hundirían mi precaria economía, y de dónde sacaba yo 1.650 euros para entrar. Estaba yo pensando en estas naderías económicas, (naderías si se comparaban con esta digna y constitucional vivienda), cuando me enteré de que la propietaria era una viuda de 85 años. ¡Ah! Esa es la solución. No pude evitar verme como J. L. López Vázquez en… (No, no, en la cabina no, cabrones. Aunque como están las cosas…) en "El pisito". Casarme con la anciana y, ¡hala!, a esperar que fallezca y hacerme con la propiedad. ¿Triste? ¿Penoso? No, patético. Patético está bien traído aquí. Aún peor sería convertirse en “el verdugo” para conseguirlo, por mencionar a Berlanga.

 El pisito http://www.filmaffinity.com/es/film717826.html

El verdugo http://www.filmaffinity.com/es/film411856.html

4.13.2012

MIENTRAS ESPERAMOS LA TERCERA.


Un cuarteto de viento interpreta el Himno de Riego.
Por una República española.

4.07.2012

REQUIEM AETERNAM DEO Отдых вечного Бога

  El loco
F. Nietzsche
La gaya ciencia, 1882
El loco.-¿No habéis oído hablar de ese loco que encendió un farol en pleno día y corrió al mercado gritando sin cesar: «¡Busco a Dios!, ¡Busco a Dios!». Como precisamente estaban allí reunidos muchos que no creían en Dios, sus gritos provocaron enormes risotadas. ¿Es que se te ha perdido?, decía uno. ¿Se ha perdido como un niño pequeño?, decía otro. ¿O se ha escondido? ¿Tiene miedo de nosotros? ¿Se habrá embarcado? ¿Habrá emigrado? -así gritaban y reían todos alborotadamente. El loco saltó en medio de ellos y los traspasó con su mirada. «¿Que a dónde se ha ido Dios? -exclamó-, os lo voy a decir. Lo hemos matado: ¡vosotros y yo! Todos somos sus asesinos. Pero ¿cómo hemos podido hacerlo? ¿Cómo hemos podido bebernos el mar? ¿Quién nos prestó la esponja para borrar el horizonte? ¿Qué hicimos, cuando desencadenamos la tierra de su sol? ¿Hacia dónde caminará ahora? ¿Hacia dónde iremos nosotros? ¿Lejos de todos los soles? ¿No nos caemos continuamente? ¿Hacia adelante, hacia atrás, hacia los lados, hacia todas partes? ¿Acaso hay todavía un arriba y un abajo? ¿No erramos como a través de una nada infinita? ¿No nos roza el soplo del espacio vacío? ¿No hace más frío? ¿No viene siempre noche y más noche? ¿No tenemos que encender faroles a mediodía? ¿No oímos todavía el ruido de los sepultureros que entierran a Dios? ¿No nos llega todavía ningún olor de la putrefacción divina? ¡También los dioses se descomponen! ¡Dios ha muerto! ¡Dios permanece muerto! !Y nosotros lo hemos matado! ¿Cómo podremos consolarnos, asesinos entre los asesinos? Lo más sagrado y poderoso que poseía hasta ahora el mundo se ha desangrado bajo nuestros cuchillos. ¿Quién nos lavará esa sangre? ¿Con qué agua podremos purificarnos? ¿Qué ritos expiatorios, qué juegos sagrados tendremos que inventar? ¿No es la grandeza de este acto demasiado grande para nosotros? ¿No tendremos que volvernos nosotros mismos dioses para parecer dignos de ellos? Nunca hubo un acto más grande y quien nazca después de nosotros formará parte, por mor de ese acto, de una historia más elevada que todas las historias que hubo nunca hasta ahora.» Aquí, el loco se calló y volvió a mirar a su auditorio: también ellos callaban y lo miraban perplejos. Finalmente, arrojó su farol al suelo, de tal modo que se rompió en pedazos y se apagó. «Vengo demasiado pronto -dijo entonces-, todavía no ha llegado mi tiempo. Este enorme suceso todavía está en camino y no ha llegado hasta los oídos de los hombres. El rayo y el trueno necesitan tiempo, la luz de los astros necesita tiempo, los actos necesitan tiempo, incluso después de realizados, a fin de ser vistos y oídos. Este acto está todavía más lejos de ellos que las más lejanas estrellas y, sin embargo, son ellos los que lo han cometido Todavía se cuenta que el loco entró aquel mismo día en varias iglesias y entonó en ellas su Requiem aeternam deo. Una vez conducido al exterior e interpelado contestó siempre esta única frase: « ¿Pues, qué son ahora ya estas iglesias, más que las tumbas y panteones de Dios?».
                                                    En este enlace encontraréis el texto y además un texto de Martin Heidegger

3.27.2012

Спасибо за ваш визит

Здравствуйте товарищи, приглашаем беженцев ошибочный. Из Испании с любовью ... и глупости. На каждом шагу спотыкается.

3.24.2012

ESCOPTOS


SIN COMENTARIOS.... de momento

3.23.2012

JUAN GRIS

Destacar que Juan Gris fue un gran dibujante, tanto de dibujo técnico como artístico (Picasso también lo fue) y de ahí esa terrible capacidad para descomponer la realidad física en planos y geometrías. Dedicaron años de estudio al dibujo. Sí, lo siento, no era una habilidad innata o adquirida por medio de una revelación mariana.

    A portaron a la pintura una nueva concepción de la perspectiva diseccionándola e incluyendo la representación del motivo desde diferentes puntos de vista. Para superar o ir más allà de la figura parece  necesario un gran conocimiento de la misma.

   Extrapolando a otras artes se podría decir que para estar en la punta de la lanza hay que ser gran conocedor de lo anterior. Hay quien no opina lo mismo y luego aparecen chorradas pretendiendo ser arte contemporáneo, abominando de los clásicos a los que ni siquiera han tenido la humildad de acercarse.

     Volviendo a Juan Gris, a diferencia de otros cubistas  monocromáticos, utilizó vivos colores en sus obras siendo un pintor que se ocupaba de la luz y su incidencia sobre el mundo físico...

     Olvidaba decir (se me olvidan estos detalles) que Juan Gris es un pseudónimo tras el cual estaba la figura de  José Victoriano Gónzalez Pérez.

     La colección Thyssen posee algunas de sus obras y también el reina Sofía en los que se puede ver su obra junto a los "descubridores" del cubismo (Picasso y Braque). Así que cuando tengáis ocasión... Cuidado porque el reina Sofía es quizás el único museo de este país que no cierra los lunes... lo hace los martes. Los que no podemos, nos conformaremos con la visitas web.

                                                 Visita virtual museo Thyssen                        Museo riena Sofía

     Aunque, con la calidad de la HD se aprecian detalles que en vivo no podemos ni imaginar.El thyssen,por cierto, tiene una visita virtual en alta resolución muy... entretenida, y un zoom muy bueno.
   Para ver la obra completa de Juan Gris ahí tenéis un enlace. Aunque los textos están en inglés, las imágenes son de una calidad aceptable. Además, podrás encargar una reproducción en óleo.

Obra completa de juan gris

¿QUIERES QUE ESCRIBAMOS ALGO POR TI O PARA TI? LO QUE HASTA AHORA SÓLO PODÍAN HACER LOS FAMOSOS, AL ALCANCE DE TU BOLSILLO.

Una carta de amor, de desamor, una diatriba insultante contra alguien, una respuesta a un correo que te quería hacer daño, un correo vengador, unos versos para enamorar, unas disculpas en su justa medida. O quizás, un cuento sobre el tema que te guste, un relato para regalar con alguien como protagonista... o incluso, un oficio para la administración pública. Tú eliges el tema, el tono... Tú nos dices lo que quieres decir, de que manera (directa, agresiva, suave, corrosiva, con sutileza, irónica) y nosotros lo compondremos con las palabras más adecuadas. Admitimos correcciones. Déjanos tu correo y contactaremos. Somos un equipo de diez amanuenses y un cerebro que coordina los esfuerzos de todos. Sin compromiso alguno y el primer encargo gratis. Pruébalo, garantizamos la privacidad pues nos envías tu solicitud a nuestraq dirección de correo ( prófugos desatinados ) y te enviaremos un correo confirmando o desestimando tu solicitud. Luego puedes cambiar lo que quieras o tirarlo a la basura. A nosotros no nos importa, una vez que es tuyo, es tuyo.

FRÍA Y SIN EMBARGO...

FRÍA Y SIN EMBARGO...
Humor |
20.01.14
  • 4
  • 3
  • 585
Sinopsis Un chico conoce a una chica. Se enamora de ella y la secuestra . Es un amor imposible e interviene la autoridad. Lo demás es previsible... o no.
Cuando la conocí me llamó la atención su piel blanquecina, siempre me gustaron las chicas de piel blanca, quizás por  mi madre,  a la que sólo vi en una ocasión. Pero, cuyo recuerdo me ha marcado de por vida. El cabello negro contrastaba con esa característica que tanto me atraía. Su discurso era... diríamos parco, pero sabía escuchar. Cuando le hablaba, su mirada fija parecía atisbar mis auténticas intenciones. En lo sexual era más bien pasiva, pero, receptiva a toda propuesta por mi parte. Nunca le escuché un no, tampoco un sí. Por tanto, no podría decir que fuera una calentorra, antes al contrario, era fría, de una frialdad que iba incluso más allá de lo emocional, físicamente fría, y sin embargo... insensible. Me preocupaba su falta de apetito, se alimentaba poco, o más bien nada. Sus necesidades eran mínimas, qué digo mínimas, eran nulas. Aún la recuerdo entrando en la fría habitación donde nos conocimos. No merecía tal destino. La escondí en mi casa. El juez dictó una orden de búsqueda. Yo sabía que era un amor imposible, unas semanas y todo habría terminado. No obstante, vacié el arca congelador de mi casa, pues me gusta que los invitados se sientan cómodos; el aire acondicionado fue nuestro gran aliado. Lo demás ya es previsible: yo perdí mi empleo en el depósito de cadáveres y ella, fue sepultada en el cementerio de Leganés.
Les rogué para que no la incinerasen. Prefería una separación  en frío  aunque abrupta y aterida; ha resultado un duelo muy complicado, es más fácil y admisible despedirse de los vivos. Recibí poco calor de mi familia y amigos. Aún menos de la de ella. Pensarían que el calor podía sentar mal a un tipo  como yo.  Lo que resulta  imposible de enterrar son esos recuerdos que como imágenes de vídeo congeladas por las parcas interfieren días y noches.
 A partir de entonces, ninguna ha igualado esa quietud, ese saber estar... y no estar. No te muevas, le digo a mi actual novia después de tenerla tres horas delante del aire acondicionado para poder follar con ella.  He pensado en comprar una cámara de frío industrial e instalar en ella el dormitorio. O poner más tierra de por medio y marchar a Escandinavia, allí todo sería más fácil y barato. Leí en Internet que el curare paraliza a sus víctimas, también la ketamina. La imagen de mi madre sigue perturbando, desde aquel féretro, mis pocas horas de sueño. Mi gélido curriculum vaga de depósito en depósito mientras espero al deshielo en un intento de olvidar.

AGRADECIDOS

Los prófugos desatinados somos agradecidos. Por tanto, agradecemos las visitas de tod@s aquell@s que entran en este anti-lugar. Especialmente nos llama la atención recibir visitas desde Estados unidos, Alemania o Rusia. Como ya podéis saber por el encabezamiento, aceptamos limosna de cualquier tipo. Además, también aceptamos peticiones. Aunque, en este caso como ya sabéis también, no prometemos nada. Y si no quedaran satisfech@s jamás devolveríamos el dinero.

Saludos y hasta la próxima.

Recuerden, cada paso un traspié.

12.11.2011

1ª parte: Baudelaire et moi

El segundo libro que compré motu proprio lo adquirí en una feria del libro. Corríase el año 83 u 84, rondaba yo los 20 años. Mi actitud ante la vida y el entorno en el que se desarrollaba ésta era, digamos nihilista, sí nihilista. Que de alguna forma se manifestaba en mis ropas (mi forma de vestir de hijo de familia pequeñoburguesa cambió) vaqueros rotos, ropas negras y Lou Reed e Iggy pop sustituyeron a toda la bazofia modernilla que hasta entonces escuchaba. En cuanto a lectura "El víbora" era lo que más leía. Un comic encasillado en la categoría de comic canalla. En este se ponía en evidencia los, digamos, errores de nuestro entorno social. Herederos de 40 años de mojigatería decimonónica (mierda que defendí en mi mas temprana adolescencia, por otra parte).Si en 1978 se aprueba la constitución hasta el 82 no comienza a desarrollarse las leyes que más contenido social tenían (ley del divorcio, ley del aborto, ley general sanitaria, y otras). Quería romper con muchas cosas y casi acabo conmigo mismo. La afición por los paraísos artificiales iba en aumento y construía una pose fundamental para mí mismo, la de displicente e indolente sobre todo. El día que fui a la feria del libro había tenido contacto con la que todo el mundo aclama. Mis ojos verdeazules refulgian tras un turbio velo. Buscaba ediciones de comic's, siempre en la línea del víbora. Vi un libro en cuya portada una mujer sentada mostraba su espalda desnuda al público. Con el tiempo supe que su autor era Degas. Pero lo que me llamo la atención fue el título del libro; "LAS FLORES DEL MAL". Sin dudarlo lo compré. Era una de esas ediciones sin apenas introducción, que entran directo al grano. "El pecado, el error, la idiotez, la avaricia...." Un poema que titulaba "Al lector". Hostias, nada más empezar y metiendo el dedo en la llaga. Yo no tenia ni puta idea de quien era Baudelaire, que conseguía pronunciar a malas penas gracias a un año de frances en una academia y a una novieta del verano de los 16 que me lo enseñó todo (gracias). Abandoné los estudios por esa época sin concluir el BUP. No tuve maestro de literatura alguno y además Baudelaire no estaba en los contenidos de la literatura de esa época en los institutos. Lo poco que conozco es con ayuda de algún amigo, algunas ediciones de contenido inestimable y mi vanidad que me impulsaba a conocer más cosas. En aquel momento no entendía mucho, me parecía en ocasiones que era como echar margaritas a los cerdos. La cuestión era que cada página me llevaba a otra y no entendía muy bien por qué. Hastío, blasfemia, víboras, placeres efímeros, paraísos artificiales, exilio paterno, "dandismo"... Esto lo relacioné con los años, al leer alguna de sus biografías y al detenerme en la lectura de esta obra. Al cabo de los años compré la edición bilingüe de Cátedra. La otra la conservé hasta que se la regalé a una amiga para que la conservará y la leyera (poco a poco). En la segunda parte hablaré de lo interesante, creo yo, Baudelaire: literatura y sociedad del siglo XIX.

12.10.2011

2ª parte. Las flores del mal. Un atentado contra el "buen gusto"





La moral del siglo XIX es la moral de "enterrar la mierda para no sentir su hedor", es cuestión de buen gusto. Esconder lo que no gusta para no verlo y hacer como que no existe es uno de los ingredientes de la moral burguesa del siglo diecinueve, llamada también victoriana o decimonónica, si le añadimos un tanto de mojigatería, otro de doble rasero y lo salteamos con la palabra decoro o indecoroso, según el caso... veremos que no hemos avanzado mucho. Por otra parte es una sociedad en transformación convulsa; la burguesía había tomado el testigo y formaba parte del statu quo. Se sucedían las revoluciones políticas iniciadas en el siglo anterior. Una nueva clase, el proletariado comenzaba a darse a conocer. En 1848 Marx y Engels publican el manifiesto comunista. En Francia se proclama la segunda república. El avance científico tecnológico se las promete felices a unos cuantos. El capitalismo y su aliado el liberalismo económico se instalan en una sociedad cada vez más industrializada. El idealismo dejará paso al pragmatismo que ya triunfaba en EEUU. Con al llegada del capitalismo y el utilitarismo (según el cual solo existe aquello que tiene una utilidad) el artista que había sido mimado y, lo que es más importante, subvencionado ; se verá obligado a ganarse las habichuelas con algo que no se sabe muy bien para que sirve. El mismo Baudelaire al ser publicada la sentencia del proceso (sí, proceso judicial) contra las flores del mal cobraba una renta a ese efecto. Y encima se pone discolo, será desagradecido.

El proceso iniciado contra Flaubert (Madamme Bovary) y Baudelaire (las flores del mal) es un proceso contra el mal gusto de poner de relieve aquello que la sociedad ha determinado en no mostrar, resulta indecoroso dar a conocer las miserias de nuestro entorno y por lo tanto de los individuos que lo forman. La moralidad imperante, en su rigidez, desplaza lo inefable haciendo que se deban de utilizar tales eufemismos a la hora de ser expresado que puede resultar incomprensible para la mayoría de los lectores. La sentencia contra Flaubert refiere: "La literatura tiene por misión elevar y distraer el espíritu, ensalzando la inteligencia y depurando las costumbres y no inspirar asco ofreciendo un cuadro de los desórdenes que pudieran existir en la sociedad". Y es que ese había sido el cometido del arte durante el romanticismo.

Baudelaire muestra aspectos dolorosos y lo menos presentable de la condición humana que, víctima ante la elección, siempre escoge el peor camino. Baudelaire era, al fin y al cabo, hijo de su época. Tampoco estaba exento de pose, su vestuario y peinado eran un ejemplo de esa actitud de dandy que profesaba y que pretendía . "No quiero la fama vulgar de una buena persona", le decía a su madre. Y es que, si lo único bueno que se puede decir de alguien es que es buena persona... mal vamos.

Las flores del mal y los pequeños poemas en prosa representan un cambio en la poesía que no será digerido hasta que no pasen unas cuantas décadas. Yo aún lo estoy digiriendo. Entre otras cosas, rompe con el dualismo prosa poesía. Algunas de las imágenes de los pequeños poemas son una expresión pura de la poesía, de la poesía por la poesía, del arte por el arte.
Malinterpretado en su época, y por tanto maldito. Baudelaire aparece como un poeta inmoral, una lectura para degenerados. Unas flores envenenadas por el fango, la inmundicia o la lascivia, que fueron silenciadas impunemente. Su afición temporal a los paraísos artificiales, su relación con prostitutas, que era y sigue siendo común entre los mortales, no son los motivos por los que se le denomina maldito. Él mismo llega a la conclusión de que la droga o el alcohol no solucionan nada si a ellos se va buscando solución pues, antes al contrario, agravan el problema. Tampoco los intentos de "exilio" por parte de su madre y su padrastro revelan una infancia atroz, objetivamente no parecen más que un intento equivocado de dar a Charles un futuro como diplomático o comerciante ("buenas intenciones" ja ja ja).
Vinculos

5.23.2010

LAS CAUSAS DE LA DESESPERACIÓN HUMANA

En tanto no hayamos llegado a suprimir ninguna de las causas de la desesperación humana, no tendremos el derecho de intentar suprimir los medios por los cuales el hombre trata de desencostrarse de la desesperación.

ANTONIN ARTAUD

9.05.2009

Un montón de palabras


ESCULMICIAS DILANTOICAS
Los forcinios esternófilos, desmatelizados inhibialmente, acuritaron félidos demiscados. Se huturbó la sinéstica exlación que desmieló la sineladación urtípida de la fión dóstica.
¡ Cuanarápitos refílidos! “ingió dolésticamente el tipión del astia demórida”.
¡Fecen cuástias rilantópicas! “Desfelió el pónico burrélido amiando su estipéndica
rolaina”.Andilipando fúlgideas espondas remerjaron dolias estúlfides.
¡Care-a, care-o! “Restiñeron los draxones”.
En la fenal sumbra de los tedos infiliales, las sejas inespávidas alomegían destucadas en demires farulentos.
Por Drender, Friborg y Albian. ¡Que me isen los dranfidios! ¡Que no esculeyo ni
antefolerbia ni espélida cotarga! “Escuesó Déniol fidiamente.
¡Aha, Dílanos y cuésticas ganzonas, orméticas lefacas o asélidas calicas! Pos la venálida domicia austesa damancones irinados de sorbones deforados. “Fordó Liesor imbristiado hasta las ferzas.
¡Care-a, care-o! “Restiñeron los draxones”.
¡Si la fortemisa solfada con el dosil, no la siface mi refado, que la solfenen los dolakis!
¡Care-a, care-o! “Restiñeron los draxones”.
Inextricalmente, las feríadas sejaban senólides damescas y amiletaron suedas y mórrigas
para los doques festuácicos. Lestor y Gontard, remifaron en yoces las difencias de suscejios.
¡Dox, lez de dolquen los miracos! ¡Y que flaquen juánviros y mosas! “extrababan
nideralmente las feríadas”
Desdóliso, Fian y Combal estrusaron las maridias sin vecarlas. Colibambas y maselas desamularon las órgilas fumánilas. ¡Por Diator que esculieron las fidas draxias, insaliando los culpédicas antulas! Ez frasin inéxcrulo.
¡Care-a, care-o! “Restiñeron los draxones”.
Foterbias y voludias arridieron por ac. Los senales andijosos resuzaron en las tromas y no la femieron adás. Los gacandos, las flósias y los ódicos simparéticos asunan los dimios infanteros en sístios lesfisaros.
Lámeta y Frasior, encudaron sus lomias y gomedas en acor de los tesilios . ¡Quia lastaz! ¡Quia lastaz! La dibaron sin coperlia.
¡Care-a, care-o! “Restiñeron los draxones”.

5.01.2009

HORACIO POTEL Y LOS DERECHOS DE AUTOR

Llevo años consultando textos de Heidegger http://www.heideggeriana.com.ar, Nietzsche (http://www.nietzscheana.com.ar ) o derrida http://www.jacquesderrida.com.ar en la página web de Horacio Potel (profesor de filosofía en la Argentina). La mayoría de los textos están descatalogados y TODOS están a disposición del publico de forma gratuita. Los herederos de Heidegger o Derrida no habían protestado ¡¿?! Con Nietzsche daba igual estaba certificada su muerte en 1900 y su obra es de dominio público (ojalá). La cámara argentina del libro ha estimado esta actividad como delictiva y ha denunciado a Horacio Potel. Lo demás lo puedes leer en este enlace
http://www.elpais.com/articulo/red/filosofo/argentino/procesado/colgar/textos/Derrida/elpeputeccib/20090430elpcibenr_4/Tes . Por otra parte he de decir que algunos textos que he adquirido en la librería no los hubiera comprado sin el concurso de estas impagables sesiones de filosofía.
El asunto es que muchos de los textos que aparecían en las web mencionadas están descatalogados o son de muy difícil localización o su precio es prohibitivo en muchos lugares de este globalizado mercado.
Artículos que jamás hubiera pensado leer, cuya existencia ignoraba y que si estuvieran publicados tened por seguro que habría adquirido previo pago (todavía vivimos en la franja globalizada que tiene recursos económicos para acceder a la cultura encarecida por las editoriales y productoras).
Derechos de autor... y nos quejamos de las patentes de los laboratorios farmacéuticos que en unos años son de dominio público. Con unos cuantos años ya va bien, no digo yo que no. Pero que una editorial compre los derechos de autor y los explote sine die... Además, y es el caso, muchas veces ni se ocupan de mantener la obra disponible, por que no es rentable o por cualquier otro motivo...
Seguiremos informando

12.31.2008

LA AMISTAD

UN ASUNTO PENDIENTE

La amistad no es más (ni menos) que otro instrumento de control del pensamiento y la conducta. Cuando quebrantamos una norma, el entorno social blandiendo la bandera de la amistad se lanza sobre uno aconsejándole o escandalizándose (según el caso). En lugar de brindarte su ayuda (o a cambio de ella, que es peor) actúan como si “lo que se debe hacer” fuera más importante para ellos que el “¿cómo estás?” o el “¿cómo te encuentras?”.

Si dijera que esta reflexión salió de la boca de un “sin techo” sobre la barra de un bar… ¿Qué dirían ustedes?

Soy Frank Redhouse y regento un pequeño negocio, un bar en un suburbio de Nueva Jersey. Atiendo a una “parroquia” de pequeños ejecutivos domesticados a golpe de hipoteca y coches de gama alta; de lejanas melenas y festivos blue-jeans. Al acabar la jornada laboral pasan por aquí bañando de cerveza o bourbon sus olvidados recuerdos de libre esclavitud “bien” aceptada; retrasando la vuelta a ese hogar de tantos deseos realizados.

No me digan porqué se hacia llamar “Pet” pero esa tarde entró en el bar, con el aspecto de un perro de lanas abandonado, pidiendo algo de comer. Mientras le preparaba un sándwich, Dick, un parroquiano de unos cincuenta apergaminados años y jardín que dejó de florecer hace décadas, invitó al destartalado Pet a tomar un bourbon. El contraste era llamativo, pero a pesar de ello, o precisamente por ello, la conversación era superficialmente fluida. ¿En común? La sensación de estar vencido, que se traslucía a través de una mirada turbia como la vida de un juez o como un delirio febril.

Dick intentaba defender la amistad como un valor humano, pero sus argumentos no pasaban de los tópicos. “cualquiera haría lo que fuera por un amigo. ¿Es así, o no, Jack?”- preguntaba a otro cliente buscando un puntal para su débil discurso que amenazaba ruina.- “Debe haber tenido una mala experiencia, habrá encontrado malos amigos. Pero, aún así seguro que tiene alguno que le podría ayudar.”- Consiguió Dick argüir en locuaz alarde (¡).-

“¿Algún amigo?, entonces ya no hablamos de la amistad…” -Respondió Pet con esta frase que nadie entendió.- “Sí, tengo algún amigo a quien si encontrara podría cambiar mi vida. Pero es difícil, hace treinta años que no nos vemos. Éramos jóvenes y eran momentos de crisis. La miseria se comparte muy bien. Usted ya sabe”. –Concluyó el viejo Pet.-

“Yo también viví la crisis… ¿No sabe usted donde encontrarlo?, seguro que él se alegraría de poder ayudarle.” – Resolvió Dick tras quedar enredado en algún recuerdo fugaz.-

“No sé, a veces ayudar a alguien significa perjudicarte… Perder lo tuyo para que otro esté mejor. Es difícil, es pedir demasiado. Aunque tuviéramos un trato”. – Sentenció sin acritud.-

Dick dejó de hablar como el que lo hace desde un lugar común. Giró su cuerpo hacia Pet y tragándose lo que iba a decir, finalmente balbuceó. “¿Cuál era el trato?”.

“En los tiempos de la crisis ambos firmamos una póliza de vida, un seguro en el que cada uno era beneficiario de la póliza del otro. Si uno moría el otro cobraría un millón de dólares. Decidimos que uno muriera para que el otro viviera bien, lo hicimos a suertes. Yo gané, o perdí, ¿qué sé yo? Esa misma noche nos tocó la “Lotto”, varios millones. Así, el golpe de suerte parecía un premio a la entrega que habíamos hecho. Parecía una de esas historias, ya sabe, esas en las que cuando los protagonistas aceptan su fatalidad el destino cambia a su favor.” –Antes de continuar, el viejo Pet humedeció las palabras con un trago de bourbon y sus ojos con una sonrisa de ingenuidad.- “Luego, nos perdimos la pista. A mi me fue mal, y de él nada sé; si lo ando buscando o voy escondiéndome de él.”

“Pero su amigo, su amigo no… su amigo no pagaría las cuotas del seguro todos estos años” –Tartamudeó Dick con la emoción contenida.-

“Fue lo único que hice bien, las pagué yo en una sola cuota cuando cobré el premio. Tendría que cumplir el trato. Si es un amigo como usted dice…” – La irónica sonrisa de Pet comenzó a derretirse desde los ojos, como en un deshielo, al ver el rostro sudoroso de su contertuliano. Se dio cuenta de aquello que los demás percibimos más tarde-.

Dick cogió su teléfono móvil y, con una frase seca como las flores de una tumba olvidada, dijo: “cariño, no me esperes… tengo un asunto pendiente que resolver.”

9.15.2008

DEL ASESINATO DE INDIVIDUOS IV

ESPERANZA

Los mecanismos de control del pensamiento y conducta humanas son de diversa índole. Entre ellos los hay de un tipo especialmente dañino; son aquellos que, con la apariencia de virtudes irrenunciables, nos abocan al ostracismo más severo. la esperanza es uno de ellos. Con la confianza en una vida mejor (aqui o más allá) se nos instala en la resignación, una de esas mierdas para que nos conformemos con lo que hay, que nos ancla y anula cualquier brote de rebeldía. la esperanza, lo último que se pierde, la caja de pandora no podía contener más que infortunios. La engañosa esperanza quedó dentro. ¿Qué se puede "esperar" de un regalo de los dioses?

LA HUMILDAD

Otro camelo. El uso pervertido y torticero que se ha hecho de la palabra humildad al convertirla en una virtud y limitar su significado al de modestia o sumisión (someter-se), me parece que la ha convertido en una herramienta más para destruir al individuo. Intentaré explicarme: que humildad procede etimológicamente de humus (tierra) es algo que no sólo sabía Tomás de Aquino, otras personas que saben latín o incluso sin saberlo también pueden acceder a ese conocimiento. Ahora, el humus sobre el que nos erigimos es el lugar en el que nos encontramos, ni más "payá" ni más "pacá". Esto no implica, y aquí el error, que al asumir este lugar no podamos ir más allá de él. En el acto de humillación, al agachar la cabeza vemos el humus bajo nuestros pies, o nuestros pies sobre la tierra que pisamos. Esto, literal y metafóricamente, nos permite conocer nuestros límites (si te tumbas sobre el suelo puedes marcarlos con un lápiz, je je). Pero, para los intérpretes del Sr. De Aquino el lugar en el que estamos nos obliga a no intentar ir más allá ni querer cosas fuera de alcance. Esto puede ser debido en parte por el ostracismo característico de las filosofías que sostienen a la religión católica y que abogan por la inmovilidad, la estabilidad, etc. Por otra parte, puede ser una forma de que los subordinados sigan siéndolo, que los que pertenecen a la tierra sigan perteneciendo a ella (recordemos que el clero era el mayor terrateniente durante la edad media y esas tierras habían de producir rentas).
Esto es, la humildad se ha utilizado para que el individuo asuma su papel y no otro, para que no intente ir más allá del lugar que se le ha asignado y en muchas ocasiones sometiéndolo, como si el acto de agachar la cabeza fuera una oportunidad para que el otro, el que "está más arriba", le golpee en la nuca haciendo que se someta y recordándole cuál es su lugar.

6.19.2008

UNA CARTA DE AMOR

CARTA A IDA. LA QUE SE FUE. LA QUE SE HA IDO

Querida Ida:
Te escribo esta carta para que sepas que tal nos va desde que lo dejamos. Por mi parte, después de sentirme como un imbécil profesional, gracias a tu inestimable colaboración (que nunca sabré cómo compensar. Guárdate las ideas) he decidido seguir escalando, guiado por ese instinto que me acompaña, y alcanzar las cumbres de la idiotez. Sabes que siempre he tenido inquietudes.
Al pequeño “mus” le ha gustado mucho la camita que le compraste, hace semanas que no se mueve de ella. Te manda saludos con cierta indolencia. A “Tinin” no lo he visto desde hace diez días. La última vez rondaba la ventana, a mi me pareció sólo un intento de llamar la atención, pero… la verdad, hace días que sube del patio de luz un hedor que cualquier forense calificaría, cuanto menos, de sospechoso. ¡Y sin seguro de vida! Vaya palo.
Con respecto a esas botas que me dijiste te enviara. No he conseguido encontrarlas; ni yo, ni los dos perros especialistas en la búsqueda de restos humanos que mi amigo Luis, el bombero, trajo a casa el pasado domingo. Mal cuerpo se les quedó.
El armario empotrado se marchó, no soportaba a la máquina tragaperras que coloqué para llenar el hueco que tú dejaste en él. Las pelusas, ¡Ay, las pelusas! No las reconocerías, han mutado y tienen sentimientos (sí, aquello que te mostré y que tu decías que era un truco de magia), las pobres… Dicen que te echan de menos. Van arrastrándose por el suelo todo el día (y toda la noche, supongo). Crecen a pasos agigantados y, mientras crecen, también lo hace su pesar (es lo normal). Hasta los cadáveres de las cucarachas han resucitado por la impresión de verlas, y claman por tu vuelta con voz de hombre menguante.
De los libros caen palabras rotas por la tris_eza, la _ena y la an_ustia que tu ausencia ha provocado. Notan la falta, sin duda, de esa sensación de que iban a ser tocados por ti y que nunca llegaba. Y es que... lo anhelado es, muchas veces, más importante que lo conseguido.
Algunas personas se alegran de que lo hayamos dejado, una de ellas está aquí, conmigo, en la cama. Pobrecita, dentro de muy poco lo comenzará a lamentar. Ya sabes, esa habilidad innata que tengo para joder la vida, para truncar esperanzas o destruir ilusiones. Me sale sola, sin esfuerzo, fluye. Aunque he decidido que, de ahora en adelante, se han acabado las tonterías, voy a dedicar esta habilidad únicamente a mí mismo, quiero alcanzar cotas de sutileza en “joder mi propia vida” que son imposibles de conseguir si no lo hago a tiempo completo. Full time, como un profesional.
Las luces encendidas, los platos sin fregar y el montón de la ropa sucia ,aún más que el de la limpia (ves como el tamaño si que importa) echan en falta un poco de atención, alguien que se fije en ellos. El desdén puede ser mucho peor que la más corrosiva de las críticas. Te mandan también saludos entre descargas, llantos, olores y arrugas.
Mi “caja de los recuerdos”, la de color negro sobre la estantería del ikea, te da las gracias por tu foto. El hueco que has dejado no va a ser fácil de llenar, ni una máquina tragaperras, ni una de tabaco, quizás un ascensor, o… mejor instalo una escombrera y que la gente deposite su escoria para poder llenarlo. Tal es su magnitud.
Por lo demás, ya ves que nada está en su sitio, como siempre, o como nunca, qué se yo.
Un beso o dos o tres para que la niña se duerma bien.

6.18.2008

LA RATA

LA RATA

En el estéril útero de la vieja, germina
la semilla que tú fuiste, gélida y sensible niña,
para no llegar a nada.

Caen cristales.
Una tarde más en esta primavera que,
con sus gotas de vidrio, destruye
ilusiones como de un dios se tratara.

Y en eterno retorno sonríe la rata que espera
el salado sabor de tu sangre, de tu sangre
entregada a cambio de nada.

Oliendo y probando el rojo viscoso,
rasgar que la lluvia ha dejado caer.
Succionando, como succiona el niño
triste, la ubre decrépita cuyo oscuro destino
está unido al de los que la sangre alimenta.

Y los buitres que engullen, so pretexto de amar,
la pútrida carne que tu muerte concede.
Y en ciega avidez alimenta la estirpe
lo que pudo ser y no fue.

Consumido el hálito infame del
más vil de los seres en este planeta ancestral.
Lo que no fue, aquello que nutre el
deseo en tu inerte mirada.

Tu mirada testigo del vetusto ritual. Los
gusanos devoran el cadáver de lo que nunca serás,
de lo que cae entre los dedos de la mano
que indica el camino que has de seguir.

¡Tu cobardía! Lo único que ahora
puedes salvar. Lo único que ahora
te puede salvar.

Y mientras, la rata devora tu carne esperada.
Y mientras, el buitre repela tus pútridos restos
y los gusanos dejando tus huesos al aire.
Y mientras esperas que llegue tu eterno momento (bien sabes que no llegará)
El buitre, la rata, el gusano y tu carne… lo mismo seréis
Muy a tu triste, muy a tu triste pesar.

NAÚFRAGO

4.21.2008

DEL ASESINATO DE INDIVIDUIOS III

LA MALA PÉCORA

La mala pécora, la pécora negra, la oveja negra ha nacido. La oveja negra, al crecer, comenzó a distinguirse del rebaño. Una masa de uniforme color blanco, se ve rota por una “mancha” de color negro. Eso negro no podía pertenecer al blanco rebaño. Es una mala oveja, una mala pécora. El pastor sólo quiere lana blanca. Para el pastor alimentar a esa oveja es un gasto inútil, ya que su lana y la de su descendencia no será rentable, él sólo vende lana blanca. Por tanto, el único camino para ser miembro de este rebaño era ser blanca, pero nuestra protagonista se obstinaba en el negro, ¡la muy díscola! Un buen día el pastor decide deshacerse de la oveja negra, al pasar junto a un precipicio camino de los pastos, de una patada, la descarrió al vacío.

La oveja negra cayó, con mejor o peor suerte, sobre unos arbustos que le salvaron la vida amortiguando el golpe. La pequeña oveja negra dio a parar en la guarida de una loba, también negra, y que en su afán maternal, la confundió con parte de su prole y la alimentó.

La oveja creció entre lobos, comió carne de venado durante la primavera y sus caninos se afilaban, su agilidad y su velocidad la hizo destacar en las salidas de caza. La oveja negra se había convertido en un predador implacable. Todo un verano cazando en la media montaña la convierte en un destacado miembro del grupo. Un miembro muy independiente ya que no atraía para la reproducción, eso le permitía no tener que someterse al ritual del coito. El otoño deja paso al invierno, crudo como la carne de la que ahora disfrutaba. La comida comienza a escasear y la manada, como cada año desciende a los valles, su primer contacto con ellos. Con los valles aparece una nueva presa ante ella: La oveja. Un bicho de color blanco sucio que emitía un sonido pusilánime cuando se veía amenazada y con una mirada estúpida que no trasmitía más que imbecilidad (incapacidad para sostenerse sola) y nadería. Al principio algo le impedía cazar a semejante bicho, aunque era tremendamente sencillo, y el olor de su carne le repelía. Tras unos cuantos días de hambre la oveja negra comenzó a cazar ovejas blancas, aunque detestaba el sabor descafeinado de su carne fofa.

Un día quedó atrapada en un agujero lleno de cal excavado por el hombre, otro ser infame que convirtió, hace miles de años, a alguno de los suyos en fieles ovejas insulsas y sumisas que se arrastraban ante él a cambio de una caricia (lobos convertidos en ovejas, aberrante, pensó). La manada al rescatarla toda cubierta de blanco se dio cuenta del error, era una oveja y como tal fue repudiada por el grupo.

Ya sola, fue a lavarse al lago sin entender bien lo ocurrido, cómo voy a ser yo una oveja yo lanzo los más agudos aullidos que estremecen incluso a la propia manada. Al llegar al lago y ver el reflejo blanco de su figura cayó en la cuenta, ¿era una oveja? ¡No, no lo era. Era ella! Era ella, la que aullaba como ninguna, y esa mirada reflejada en el agua no era la de una imbécil, era la mirada aguda y fiera de un predador, mirada que a ella misma asustaba al verla.

Así la cosas, era una oveja pero su color la separó del rebaño, era una loba pero su aspecto ovino la separó de la manada. Tenía las habilidades del más implacable cazador y el aspecto de una inofensiva oveja, esto podía darle gran ventaja. Ahora la oveja negra conoce el premio por ser ELLA: “no ser aceptada en ninguno de los grupos”.

Hoy en día, la oveja negra vaga solitaria por montes, valles y páramos, es temida por los débiles y respetada por los fuertes, y cuando le apetece comer y no tiene nada, cuando el hambre aprieta, consiente en comer alguna de esas insípidas ovejas. Y no duda en dejar sin comida a los cazadores. No es venganza, es hambre. Al fin y a la “postre”, ellos no consideran importante a cada uno de sus individuos. Es más, los anulan. Poco importa pues, devorar una oveja o dejar a un lobo sin comida. Eso sí, siempre y cuando el grupo se mantenga. De lo contrario se le acabaría la comida, je je je ¡La mala pécora!

4.17.2008

HISTORIA DEL ASESINATO DE INDIVIDUOS I
(El palo)
Acabar un día de parranda con reflexiones de este tipo es gratificante. Estando en mi casa ya a horas del día después, Jose (crevillentino de adopción y mecánico de profesión) dicta la siguiente sentencia palo en mano: “tu no estas aquí para pensar, para pensar está el palo” tú no entiendes al palo pero yo sí, yo hablo con el palo y te digo lo que el palo dice. El palo dice: haz o piensa o... no hagas o no pienses esto o aquello. Yo no lo digo, lo dice el palo en su infinita sabiduría. Sustituye al palo por dios, la naturaleza, el gran espíritu o lo que te salga de los huevos.

PD: ya hemos trascrito las enseñanzas del palo en un libro sagrado “La reBeeelación”, habíamos pensado un titulo menos sonoro, pero más contundente, algo así como biblia, corán, talmut... pero necesitábamos un nombre que diera confianza. De venta próximamente en tiendas de 24 horas.



DEL ASESINATO DE INDIVIDUOS II
(Los pecados capitales)

La ira, la envidia, la avaricia, la lujuria, la gula, la pereza, la soberbia

Los siete pecados capitales, cabeza de todos los demás pecados y antivalores o vicios declarados por la iglesia, han sido compartidos por nuestra cultura desde hace más  de 1000 años.
Todos ellos suponen una afirmación del yo, del individuo. Mantenernos lejos de estos comportamientos, sentimientos y pensamientos es uno de los mecanismos para anular nuestro deseo de individualidad. Declararlos pecados es, una vez más, acudir al poder divino para asegurar el cumplimiento de las normas (el palo dijo...). Además estos pecados son una condena directa tras la muerte, no pudiendo disfrutar del producto final, es decir, del paraíso (quizás la mayor estafa de la que los humanos han sido víctimas). Sólo la confesión nos puede librar de la condena (es importante conocer de inmediato cuándo y dónde hay una mala pécora, una oveja descarriada del grupo).
Aún hoy día, entre la gente joven, incluso entre personas que no han recibido una educación religiosa, se escucha al comentar los pecados capitales frases del tipo “hombre es que si te pasas…” Y es que si te pasas, hasta los besos son lesivos compadre y para ese viaje no hacía falta alforjas. ¡Vamos, no me jodas! Pues claro que si te pasas la ira es un problema pero tanto como pueden serlo las caricias (prueba y verás).
Veamos de forma sucinta cada una de estas “bestias negras” que, para más INRI, son de género femenino (ja ja ja). Las mujeres siempre cerca de los "males", y es que mira que sois remalas (jajajaja):
· La ira: la ira es el sentimiento que nos protege de las injusticias, de los ataque del resto del grupo. Es un sentimiento social que impide que seamos “tragados” por el grupo.
· La envidia: muy mal vista, sobre todo por los envidiados. Que por otra parte disfrutan en secreto de tener algo envidiable. Primeramente para envidiar lo del otro tenemos que ser uno frente al otro. Es una actitud del individuo, solo siendo individuo se puede envidiar. Sólo desde la "yoidad" se puede desear lo de la "alteridad" (je je je, toma pedantería). Además nos señala la existencia de desigualdades que pueden estar a la base de esa actitud.
· La avaricia: es curioso que la institución que ha acaparado más bienes y riquezas a lo largo de la historia considere la avaricia como un pecado. Ya que la avaricia es la actitud del acaparador del que acumula bienes y riquezas. El individuo que mira por sí mismo y para sí mismo, el que retiene para que no le falte.
· La lujuria: hoy bien vista (en un plano meramente ideológico,claro está) por ciertos sectores de nuestra sociedad. La lujuria es una de las satisfacciones del individuo, el individuo se autoafirma también a través de la satisfacción sexual, del placer sexual. Utiliza la conducta reproductiva (bien común) no como medio para procrear y traer más fieles o productores al mundo, sino como un fin en sí misma (por el placer que proporciona). De nuevo el individuo (utilizando el placer sexual) prevalece sobre los intereses del grupo (engendrar nuevos componentes del grupo). Y es que, como dice javier krahe, no todo va a ser follar. Ja ja ja
· La gula: otra de las satisfacciones del individuo. La gula proporciona placer al sujeto a través de satisfacer una de las necesidades biológicas primarias del individuo. Fijate tú, que por cagar, ¡oye! que no te tienes que sentir culpable. Claro, que un pecado capital no podía ser un pecado de mierda (chiste fácil).
· La pereza: la inactividad del individuo puede ser perjudicial para el grupo. Necesitamos sujetos que produzcan, que trabajen para “el bien común”. El bien común no es más que el bien de los poderosos. De los que reciben el resultado de nuestro trabajo, la riqueza. Un amplio porcentaje del trabajo del individuo va a parar a las arcas de lo poderosos, que curiosamente son los que hacen las normas y casualmente detestan la pereza (Eso sí, en cuerpo ajeno)
· La soberbia: máxima autoafirmación del individuo, la soberbia y sus hermanas permiten que el ser humano se considere importante como individuo. Si todos nos consideramos los seres más importantes de nuestra vida somos cada uno de nosotros (en realidad lo somos, incluso lo único necesario de nuestra vida) no nos dejaríamos pisar ni explotar por nadie. Difícil de manejar un grupo de soberbios.

Seguiremos hablando del tema en próximas entregas.

1.04.2008

12.25.2007

CUENTO DE NAVIDAD

CUENTO DE NAVIDAD

El tiempo y el espacio quedaron congelados al descubrir el cadáver de Juan que colgaba, en hipnótico balanceo, sobre la mesa engalanada del comedor familiar. Toda la familia quedó inmóvil ante el cuadro escénico, propio de una tragedia griega. “¡Oooh, Está mueeerto!”. Clamaron a coro. El cuñado Ernesto replicó: “Siempre hay alguien que la joda”. Su hermano Felipe exclamaba: “Algo me temía. El muy cabrón, siempre hizo lo que fuera por llamar la atención.” “¡Esa joroba!, siempre la vi exagerada”. Añadió su cuñada Pepa. Su hermana Finí, la cabeza pensante de la familia, definió: “a nosotros no nos jode la noche nadie, vamos a cenar y el que no pueda que le den”. “¡Vamos y vamos!, elegir esta noche tan señalada para montar este numerito”. Dijo su madre indignada, y añadió: “¡Desde luego! ¿Eso es lo que yo te he enseñado?“. “Claro, así sabía que nos acordaríamos de él todos los días de Nochebuena. No es lo mismo morir el 7 de Febrero que el 24 de Diciembre”. Dijo un tío de Burgos que venía cada año a “disfrutar del calor familiar en estas fechas”.
Era el día de Nochebuena del año 2007. Como todos los años la familia se reunía en casa de la matriarca para la cena anual. Juan estaba muy harto de esa pantomima. Risas de calculada armonía, los chistes del gracioso de su cuñado, las muecas de Pepa y los “tú lo que tienes que hacer es…” Era el Benjamín, por lo tanto, nació el último. Y a partir de entonces era el último para todo. Además la madre naturaleza, la muy cabrona, le había “obsequiado” con un extra: un cuerpo “tuneado” con una oronda joroba que, a modo de mochila, cargaba sobre su espalda curvada por el peso. Este año la familia se había pasado con él otra vez. Repartir la herencia había supuesto que el benjamín se quedara con una parte no proporcional. Una vez más a sufrir por la falta de proporción. Durante el año, el rencor había ido gestando una hostilidad insoslayable. Había pensado en diferentes formas de vengar la afrenta, pero la que había elegido era lo más retorcido que su cerebro había sido capaz de desarrollar. ¡Hasta ahí podíamos llegar! Esta vez se iban a enterar.
Ernesto y Felipe procedieron a descolgar el cadáver. “¡Cuidado con el mantel, me lo regaló la abuela!”, gritó la madre protegiendo las señas de identidad familiares. Cuidadosamente dispusieron el periódico del día sobre el mantel, que se abrió por la página de necrológicas. “Coño, cambia de página”, dijo Ernesto. EL cuerpo muerto pesaba lo suyo. Felipe, cargado con el peso, pisó la ensaladilla rusa. Su mujer lanzó un alarido desde el sofá: “¡Con lo que me ha costado!”. Al resbalar, el cuerpo de Juan cayó en el sofá sobre su cuñada Pepa, dándole con la joroba en plena cara. “Quitádmelo de encima, me va a estropear el maquillaje”. El tío de Burgos abogaba por llamar a la policía. “Sí, y que nos joda la cena y se salga con la suya. ¿Porqué no lo sentamos a la mesa?, al fin y al cabo, como nunca hablaba”. Dijo su hermana Finí. “Y hasta tiene los ojos abiertos. Sentadlo aquí, a mi lado”, añadió su hermano. Pepa le daba de cuando en cuando algún golpe en la joroba, por comprobar si no era un montaje para llamar la atención. Su hermano le propinaba collejas, en un gesto que no repetía desde la niñez. Mientras, la familia recordaba las mismas anécdotas que cada año se repetían en la cena, y que fomentaban la unión de la familia y afirmaban el rol de cada miembro. Este año el tema “estrella” era Juan. Felipe, el mayor, recordaba como Juan, el jorobado, tenía serias dificultades cuando caía boca arriba y apoyaba su joroba en la pared para darse la vuelta e incorporarse. Reían todos mientras Juan, llevaba ya puesto un gorro de papa Noel y unas gafas con bigote modelo Groucho Marx. “La familia disfrutaba del postre”. No hubo las discusiones acaloradas de otros años; Ernesto y Felipe parecían de acuerdo en casi todo, Pepa y Finí comentaban las tendencias de moda y el tío de Burgos, con las manos bajo el mantel, junto a la sonriente matriarca… No hay nada como una ofensa al grupo para fomentar su cohesión. Al acabar la cena era tradición que se cantaran villancicos. Finí “tocaba” la guitarra y los demás, como podían, desentonaban. El cuerpo de Juan se escoraba a estribor y decidieron ubicarlo en el sofá. Al no poder estirarlo, pues el rigor mortis había hecho presa de sus articulaciones, lo acostaron de lado con las piernas encogidas y mirando hacia el interior, con lo que su giba excedía los límites del asiento.
Llegaron a la casa primos y sobrinos con la alegría “natural” de esas fechas. “Y el tío Juan, ¿Qué le pasa?”. Preguntaban los niños. “Ya está borracho, como todos los años”. Informó rápidamente la hermana. “¡Tiene los ojos abiertos!”, dijeron los niños. Los sobrinos le ponían sombreros y matasuegras, le cambiaban las gafas y antifaces como si de un maniquí se tratara; jugaban con los cochecitos de papá Noel sobre el cuerpo inerte del jorobado Juan. Impregnado de restos de turrón y mazapanes, los invitados cogían los dulces de la bandeja o de la chepa de Juan indistintamente. La pandereta golpeaba sobre su joroba, que sobresalía del sofá, haciéndole partícipe de los cánticos familiares. Al cabo de un rato el cuerpo de Juan comenzaba a molestar, los niños le golpeaban y se subían por su joroba como si de un tobogán se tratase, en un intento de despertarlo. Los efluvios de la descomposición empezaban a hacerse notar. “¿Por qué no lo llevamos a la cama?”, dijo Felipe. “¡Sí, como todos los años!” Gritaron en coral acuerdo. Y es que, este tipo de rutinas vertebran la cultura familiar.
Dieron las cuatro de la mañana y ya sólo quedaban los componentes iniciales de la cena. “Llamad a la policía y que se lo lleven”. Dijo Pepa, la querida cuñada. Mientras marcaban el número, Felipe pensó en las consecuencias que, sobre las vacaciones, tendría el suceso (policía, preguntas, sepelio… Las vacaciones a tomar por culo) y propuso una solución que la familia supo apreciar.
Navidades de 2012, como cada año Juan el jorobado se sentaba a la mesa de la familia Pérez. Como toda su vida habló poco y compartió menos. Como siempre estuvo el rato justo, hasta que se acababa el segundo plato. Luego volvió al congelador que su madre, bajo llave, custodiaba todo el año esperando estas fechas tan entrañables. En las que Juan el jorobado salía, como figura del belén, para poder disfrutar del calor familiar. Y es que, en estos días tan señalados, se olvidan las diferencias y los rencores. Es lo que tienen.

NÁUFRAGOS DESATINADOS. NLCD

11.15.2007

El pueblo kurdo ¿Víctimas del pecado original?


Mientras preparo la entrada de la 2ª parte de Baudelaire os cuento el motivo por el que añadí lo de la libertad para el pueblo kurdo.


L O Q U E Y A S A B Í A


Ser kurdo era un delito en turquía hasta no hace mucho, la pena podía ser facilmente de muerte. Una condena de y por nacimiento, el origen kurdo convierte a una persona en un ciudadano de segunda aunque naciera en estambul. Hoy en día ya no son encarcelados. El lider del PKK (partido de los trabajadores del kurdistan) está preso en turquía. Turquía realizó masacres también entre el pueblo Armenio (1.500.000 armenios muertos). Tras la caída del imperio otomano después de la primera guerra mudial por alinearse con los perdedores, turquía ve amenazada su existencia pues se la iban a repartir como botin de guerra. attaturk lider y fundador de la republica laica de turquía (1923) se ve abocado a una auténtica guerra de indepenencia que delimita prácticamente la actual turquía. Pero los kurdos continuaron siendo masacrados por la nueva república y aunque actualmente los kurdos de turquía no son encarcelados la represión y la injusticia política contiuan y el riesgo de nuevas oleadas de asesinatos de kurdos es patente. Hasta aquí lo que ya sabía y algunos de vosotros también.


A H O R A L O N U E V O


Pues un amigo que es kurdo y ha vivido toda su vida en estambul me decía ayer que su identificación tiene un sello de color diferente, aunque hayas nacido en ankara o estambul y tu identificación y nacionalidad sea turca llevas la marca de kurdo (en el color del sello, que sutileza ja ja ja) para que la policia cuando te pida la documentación lo sepa. Esto nos suena de otros lugares ¿no? Si la situación empeora, que no sería de extrañar, y eres kurdo tu identificación te delata, peor que llevar la marca en la ropa. Date por jodido.

11.11.2007

Pasión en la sierra de Crevillente

Como veis no es una peli porno. Pero no es apta para... bueno no es apta. El palo me lo encontré en el barranco de san cayetano y forma parte de una barandilla que hay en un paso un poco expuesto en la senda que va por arriba del barranco y que es la que usa casi todo el mundo para subir a "picacho".
Yo, que hago cualquier cosa por parecer especial, subo por el barranco y bajo por la senda. La ascensión por aquél te ahorra la escalinata del principio de la senda y es más entretenido. Bueno, pues lo cogí para subirlo hasta el punto donde la senda cruza el barranco y después, al regreso, dejarlo en el lugar desde dónde el imbécil de turno lo tirara al barranco.
El resto de la asecención lo hicimos por un pedregal infame que no se deja, que en varios tramos te desplaza hacia abajo. Nosotros y... alguna cabrica
Una trepada y....
Cumbre

11.09.2007

Próximamente en sus retinas

250px-Baudelaire1

Charles Pierre Baudelaire

Y...

"Pasión en la sierra de Crevillente"

Sin...

Lucía Lapiedra (ideal en este entorno rocoso, pues eso ideal)

Ni ...

Nacho Vidal (cuya pétrea polla también vendría pintiparada)

Banda sonora de la "escuadra de metal y percusión SPQR"

Ver el trailer

11.07.2007

¿Leopoldo María Panero y la maldición el cielo?

Yo tuve la ocasión de escuchar a Leopoldo María Panero en una conferencia que impartió en la catedralicia Orihuela. Ya me inquietaba su poesía y fue el único evento al que asistí de un encuentro sobre salud mental. Corría, creo recordar, el año 98. La disartria provocada por los años de tratamiento con neurolépticos dificultaba la comprensión del discurso de un tipo que tan pronto hablaba castellano como lo hacía en francés o inglés. Que citaba a Lacan en francés, citas y más citas (por qué cita usted tanto, para que me tomen en serio,recuerdo haberle oído) Un discurso crítico con la psiquiatría española, que a Leopoldo le tocó sufrir, y que aún retumba entre las paredes de los viejos manicomios. Un entorno hostil hacia su enfermedad. Unos por incomprensión, otros probablemente por interés personal (el joven díscolo y la justificación perfecta no sin algo de venganza para encerrarlo, algo que seguramente hiciera viables algunas de sus "certezas" en detrimento de una mejor evolución. Sólo hipótesis ) otros tal vez por un laissez fair de "buenas intenciones", favorecieron un largo periplo por frenopáticos. Viaje que se convirtió en posada hasta la actualidad. Aún hoy en día se le responsabiliza a través de su alcoholismo de la enfermedad que le acompaña (por favor editores y escritores de pequeñas notas biográficas, establecer relaciones causales no creo que sea su labor. Sería suficiente con nombrar que tiene esquizofrenia). Incluso el ya fallecido Michi, su hermano menor, que en “el desencanto” confraternizaba con él, en “después de tantos años” describe su situación de poeta maldito y loco como una elección, como algo que iba en el mismo paquete y que Leopoldo había elegido(cuando es al "azar y a ninguna maldición de demonio o de dios debo mi ruina"). No digo que no haya poses que contribuyan al papel de maldito, pero la esquizofrenia no es una pose ni se puede posar de esquizofrénico. Si este tipo de actitudes pretende justificar el abandono al que fue relegado, más que una acusación hacia Leopoldo parecen un intento de librarse de posibles acusaciones internas o del entorno social. En cualquier caso ese abandono no lo merece ni aunque se lo hubiera buscado, que no es el caso. Impresiona ver que, en ocasiones , es el loco el que tiene más clara sus situación y la de su familia, su franqueza es demoledora hasta para él, siendo incluso Leopoldo el más perplejo. Y lo digo desde la experiencia de trabajar casi una década en contacto diario con la locura en un centro para personas que padecen este tipo de trastornos(soy psicólogo de profesión, en fin, nadie es perfecto). Pero además Panero es “un loco tocado por la maldición del cielo”. Su madre relata en “el desencanto” como Leopoldo, desde niño, rodeado de escritores y con acceso a un bagaje cultural que ha sabido aprovechar (desde Ovidio, Góngora o Rimbaud), lidiaba con la realidad y la fantasía de una forma llamativa, desde las bromas del colegio hasta relatos fantásticos o poesía incipiente. Para muchos de nosotros el lenguaje puede suponer una limitación a la hora de escribir o de hablar, encasillando nuestra realidad y nuestra fantasía dentro del lenguaje con la que la nombramos. Leopoldo , me da la impresión, parece ser uno de esos privilegiados para los que no tiene límites, utiliza el lenguaje escapándose a su dictadura, a su tiranía, quizás aprovechando ese momento en que el verbo está aún vivo, cuando él lo crea, lo pare, lo vomita, lo excreta, para después convertirse en cadáver al estrellarse contra el papel en el poema, como lo hace luego con el lector en un acto de renacimiento para estrellarse contra su cerebro y su oído y morir de nuevo. El lenguaje de Panero nace con infinitas posibilidades… envuelto en la música y el ritmo que les es impreso también como mecanismos de... ¿libertad? Al leer por vez primera un poema de Panero un mundo se erige ante uno mismo, un mundo por descubrir y descubrirte. Joder que pedante me he puesto. Mira que me gusta oírme. Bueno que os quede algo ineresante de esta lectura:
Su web http:// www.albaceteliterario.com/leopoldomariapanero en obras pero ya visible.
Sería incapaz de elegir uno o poemas para incluir, así que os remito al vínculo http://www.amediavoz.com/paneroLM.htm
Había un error en la reseña biográfica al hablar de su enfermedad. Avisados por e-mail y (tomad nota) esa misma noche corregido. Que eficientes tío así da gusto. Muy recomendable la antología para una vista de pájaro de la producción de Panero. Dobles felicitaciones a media voz. Comprad de todos modos algo de su obra, que fuma mucho y bebe mucha cocacola.
Por otra parte le presento mis respetos por si algo de esto leyere y disculpas por el atrevimiento a Leopoldo María Panero.
Bibliografía, entre otros:
Editada una poesía completa a un precio asequible “Poesía Completa” (1970-2000), Edic. de Túa Blesa, Visor, Madrid, 2001.
Editorial nivola editó en 2003 CONVERSACIÓN, un texto escrito a máquina por el ropio autor, con tachones y correcciones incluidas (pocas por cierto, si es el primero, qué fluidez), que la editorial decidió no retocar y publicar tal y como les llegó.
Algunos ensayos, traducciones (peter pan o al propio Lewis Carroll) y tres incursiones en la narrativa.
Dos peliculas documentales
"El desencanto" de Jaime Chavarri una lección de la dinámica en las familias. Con la asignación y asunción de roles, filias y fobias,etc.
"Depués de tatos años" de Ricardo Franco ruinas y más ruinas. El monólogo de Leopoldo... sin comentarios, pero tambien el de Michi.
Tengo la suerte de no haberlo leído todo, aún puedo descubrir por vez primera poemas de Leopoldo María Panero y dejar que se estrellen contra mi retina, contra mis oidos y mi mente.
Para una bibliografía casi completa, links de entrevistas y estudios sobre la obra de Panero http://www.escritores.org/panero.htm
Tanto comentario elogiando su obra por parte de críticos y especialistas va a acabar con lo que decía ser lo más brillante de su vida, el fracaso.
Este es un repaso que comienza con este post sobre prófugos y náufragos, quería que fuera el primero, más que nada por mí. Quizás la obra de Leopoldo forme parte de mi pose. En cualquier caso nunca me ha dejado indiferente. Os lo aseguro.